María, la dueña de la
casa, falleció el Martes 3 de Febrero del 2004 a las nueve de la mañana en el Hospital
“El Neveral” de la ciudad de Jaén a consecuencia de un edema pulmonar.
Más que
nunca, curiosos e investigadores del fenómeno paranormal más importante de la
historia, se siguen haciendo la misma pregunta: ¿Qué pasará con las caras?
¿Seguirán ahí? ¿Se marcharán para siempre? Interrogantes que todos se hacen
desde hace casi 33 años. Tal vez, María, esa extraña y mágica mujer, se haya
llevado el secreto a la tumba...
El periodista Andrés
Moya, en el Diario El Mundo comentó a causa de la trágica muerte de María
Gómez Cámara: “Si la cara es el espejo del alma como dicen, en el caso de María
Gómez Cámara su alma era el espejo de las caras más famosas de España”.
Y efectivamente así es.
Desde aquel 23 de Agosto del año 1971, fecha en la que apareció la primera cara
en belmez, nunca se dejó de hablar, informar y escribir sobre dicho misterio.
Las caras de la discordia, como llamaron algunos, fueron siempre centro de
atención.
En la actualidad, las
caras de Bélmez están nuevamente en todos los medios de comunicación. Con la
misma fuerza, con la misma intensidad, con los mismos interrogantes, con el
mismo misterio de sus inicios. Motivo de todo este terremoto periodístico la
tiene la triste desaparición de la dueña
de esas caras que desde luego marcará un antes y un después en esta historia
oficialmente imposible. María Gómez Cámara murió. Seguramente, se haya llevado
consigo infinidad de historias y secretos incontables e inconfesables.
Muchos, decían y siguen diciendo, lo que afirmaba
aquel catedrático de la Universidad de Friburgo de Alemania en 1974, Hans
Bender: “Con María desparecerán las
caras”. ¿O tal vez no? Parece que ello está más presente que nunca, porque,
pese a quien pese, el gran enigma de Bélmez, nunca desaparecerá. Seguirá ahí, retando a todo y a todos.
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